jueves, 20 de abril de 2017

MILHOJAS DE FRESAS





Los niños y la Baronesa Frambuesa no casan muy bien... vamos... no casan nada. No los encuentra  divertidos ni interesantes (salvo que el angelito sea tan singular como ella),  y no tiene ningún interés en conquistarlos, despertar su curiosidad o hacer una exhibición de inocuas  rarezas que la conviertan en la loca del cuento. Realmente los mira como a bichos raros, claro que   el sentimiento es reciproco.
En las pocas (y obligadas) ocasiones  que tiene que "alternar" con ellos, no hace ningún  esfuerzo. Si fuera española diría aquello de : "lentejas, si las quieres las comes y si no... también".  En la mesa es estricta (lo que  se agradece)  y no hace concesiones a comidas infantiles. Según ella , el gusto y los modales no siempre vienen "de serie" (¿será como  el airbag en los coches?), así que hay que educarlos desde el principio, sin concesiones... Sólo cuando llega el postre cambian las cosas y convierte  un clásico milhojas,  en el "milhojas de la Barbie". No tengo claro si es  un guiño infantil al invitado,   al color del mantel, o a ella misma ...



INGREDIENTES:
para 8-10 raciones

2 planchas de hojaldre de 275 gr. cada una (he usado Ldel , rectangular)

- crema diplomática-
- para la crema pastelera- (*)
250 ml de leche entera (500 ml)
una vaina de vainilla
piel de naranja o limón
50-60 gr. de azúcar (120 gr.)
25 gr de maicena (50 gr,)
2 yemas de huevo(3)
+
200 ml. de nata para montar
4 cucharadas soperas de azúcar glass
2 sobres de Natafix de Dr. Oetker

400 gr. de fresas (*)


ELABORACIÓN:

CREMA PASTELERA
1º  Infusionar la leche.  Para ello ponemos en una olla, la leche, el azúcar, la  vainilla y la piel piel del cítrico. Cuando hierva lo retiramos y lo dejamos tapado.
2º Mezclamos en un bol la maicena y las yemas, añadimos 2 o 3 cucharadas de leche y disolvemos perfectamente.
3º Ponemos la leche al fuego sin la vainilla ni la piel; cuando hierva volcamos el contenido del bol. Cocemos la crema, sin parar de revolver en ningún momento, hasta que espese. Bajamos el fuego y seguimos cociendo (y revolviendo) unos 10 minutos más. Si la crema hace grumos (no debería), metemos la turmix y seguimos removiendo a fuego bajo-medio. Vertemos en un bol y cubrimos con papel film "a piel", es decir, con el plástico pegadito a la crema, de esta manera evitamos que haga costra al enfriar.

4º Encendemos el horno a 200 grados. Colocamos las planchas de hojaldre sobre papel de cocina, las doblamos a la mitad, las pintamos ligeramente con una brocha mojada ligeramente en agua con azúcar. Pinchamos con un tenedor toda la superficie repetidamente. Llevamos al horno arriba y abajo, El hojaldre no tiene que subir en el horno, por ello debemos vigilarlo y abrir periódicamente  (habrá que hacerlo varias veces) y pincharlo con el tenedor repetidamente. Cuando este bien dorado lo retiramos del horno 

5º Montamos la nata como de costumbre (bol, varillas y nata , muy muy fría), a medio montar añadimos el azúcar y Natafix , que le dará más consistencia e impedirá que se baje, y seguimos batiendo hasta que esté perfectamente montada.

6ºAñadimos a la crema fría un par de cucharadas de nata y mezclamos, lo más normal es que por la diferente consistencia haga grumo. Metemos nuevamente la Minipimer, hasta que la crema se vuelva más fluida. Añadimos el resto de la nata, con cuidado para que no se baje, hasta que se integre perfectamente. Mezclamos con las fresas

7º Colocamos un aro de pastelería sobre la fuente de servir, y dentro de él, una plancha de hojaldre. Extendemos la crema de fresas y cubrimos con la segunda plancha de hojaldre. Lo llevamos al frigo un par de horas

8º Cubrimos el milhojas con un glaseado hecho con  azúcar glas (mucho, unos 250 gr. aprox, aunque afortunadamente no se usará todo), y unas gotas de agua, hasta que se forme una crema, que extenderemos por encima, creando una capa ligera (a menos , que nos chifle el azúcar en cantidad), También podemos utilizar unas cucharadas de zumo de fresa, en lugar del agua, con lo que adquirirá un tono rosado sin necesidad de colorantes químicos. Retiramos el aro y listo




(*) La crema diplomática debería llevar mitad de crema pastelera y mitad de nata montada, por ello pongo las cantidades entre paréntesis. Yo he puesto solo la mitad porque prefiero el resultado con más nata y menos crema 
(*) Podemos cortar las fresas en trozos pequeños y dejarlas macerar con un par de cucharadas de azúcar y un poco de zumo de naranja  o unas cucharadas de licor, o un par de cucharadas de vinagre de moneda.   escurrimos y añadimos a la crema. Si no tenemos tiempo (o ganas) simplificamos sin macerar las fresas