miércoles, 29 de marzo de 2017

ESCALOPINES AL CABRALES






A la Baronesa Frambuesa le fascinan los quesos de calidad, según ella,  un buen queso debe degustarse como corresponde a un gran producto, apreciando todo su sabor y cada matiz del mismo, con los acompañamientos adecuados  y sin desvirtuar su sabor y textura.  Aún así , en ocasiones (pocas), utiliza el queso para realizar platos  como éste, una preparación muy fácil, rápida y socorrida.    Eso sí, no vale utilizar quesos de poca calidad; es necesario un buen queso, en este caso un buenísimo Cabrales, pero también podemos utilizar cualquier otro buen queso azul. No es un plato elaborado ni complicado, pero podrá solucionar una comida sin mucho esfuerzo. 



INGREDIENTES:
1 kg. de escalopes (no demasiado finos) de carne de ternera o cerdo
aceite
sal y pimienta
harina
2 cebollas grandes
vino blanco
150 gr, de queso Cabrales
80-100 ml. de nata para cocinar (*)


ELABORACIÓN:

Cortamos la cebolla y la pochamos en aceite de oliva, hasta que esté bien pasada.
Trituramos la cebolla con la Turmix, Añadimos medio de vaso de vino blanco y el queso, Removemos hasta que esté disuelto
Limpiamos bien la carne de nervios y grasa. Salpimentamos ligeramente. Pasamos por harina muy muy ligeramente , sacudimos para que no tenga exceso de harina. Los pasamos por  aceite bien caliente, vuelta y vuelta. Sacamos y escurrimos sobre papel de cocina
Colocamos los escalopes en la salsa, añadimos la nata  y llevamos a ebullición. Retiramos 



(*) Generalmente los escalopines al Cabrales, no se cocinan así,  se hacen utilizando gran cantidad de nata. Yo prefiero esta forma de hacerlos, creo que con la base de cebolla no es necesario, para crear una salsa untuosa y sabrosa, utilizar más nata, Como es natural, cada uno tiene su forma de hacerlos y sus gustos y hay quien prefiere una salsa que lleve exclusivamente nata y queso, que  está buenísima pero resulta más contundente.

lunes, 27 de marzo de 2017

TARTA DE PERAS Y ALMENDRA - TARTA BOURDALOUE




Según la Baronesa Frambuesa, el nombre de esta tarta (¡riquisisimaaa!) es muy dado a malas interpretaciones. No me extraña, yo, en mi total ignorancia de idiomas extranjeros, sería incapaz de pronunciarlo. Pero no,¡ qué va!, nada tiene que ver con la  pronunciación del palabro. 

Los equívocos vienen por el significado, porque,  la palabra bourdaloue (en inglés) denominaba  un artilugio  bizarro, insólito, increíble  y   rocambolesco por demás, que las refinadas damas del siglo XVIII y parte del  XIX, utilizaban en lugares públicos carentes (cosa normal entonces) de aseos. No diré más. Pero advierto: si encontramos una pieza antigua en porcelana o plata, con aspecto de salsera  carente de hendidura para verter la salsa,  o  aspecto de taza alargada, probablemente no es lo que parece.  No sé... a veces la Baronesa cuenta historias tan increíbles, que cuesta creerlas... pero,  bien mirado, ella misma es bastante increíble...

Visto lo visto, habría sido  mejor que la tarta llevara otro nombre, pero cuando fue creada en París, hacia 1850 , era común que las tartas recibieran el nombre de la calle donde estaba la pastelería (en su caso, rue Bourdaloue) , y no del establecimiento o del pastelero autor de la misma. 

Decidido: la llamaré simplemente, tarta de almendra y pera...  y no compraré ¡jamás! una salsera que no tenga pico...




INGREDIENTES:
-para 6 tartitas individuales de aprox 11 cm de diámetro- (*)
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6 peras
agua
200 gr, azúcar
1 vaina de vainilla
zumo de limón
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8 hojas de pasta filo (*)
200 gr. de almendra molida
200 gr. de azúcar
160 gr. de mantequilla
4 huevos
6 cucharadas de licor (brandy, amareto, ron...)
almendra laminada o granillo de almendra



ELABORACIÓN:

Pelamos las peras, dejando el rabillo, Las cubrimos de agua, añadimos el azúcar y la vaina de vainilla abierta longitudinalmente. Tapamos con film y llevamos al microondas. El tiempo dependerá de lo maduras que estén las peras, pueden ser 10-15 minutos. Lo sabremos cuando un cuchillo las atraviese con facilidad. 

. Forraremos cada molde con una hoja de pasta filo y 1/4 de otra. Extendemos la hoja y pincelamos ligeramente la mitad con mantequilla liquida, doblamos; pincelamos la mitad resultante y volvemos a doblar; quedara la hoja doblada en cuatro, como un pañuelo; pincelamos y colocamos el cuarto de hoja restante. Lo colocamos en el molde

Batimos la mantequilla hasta que duplique su volumen; añadimos el azúcar y continuamos batiendo. Añadimos los huevos uno a uno y finalmente la almendra molida y el licor.

Distribuimos la crema de almendra en los moldes. Con cuidado de no romperlas, descorazonamos las peras por la base, Colocamos una de ellas en el centro de cada molde.  Espolvoreamos con  el granillo o la almendra laminada.

Horneamos a 180 grados, aprox 25 minutos. Debemos tapar los moldes con papel de aluminio para evitar que se quemen, pues la pasta filo se quema rápido.



(*) Si no tenemos moldes metálicos de esta medida, podemos hacer una tarta grande, o bien utilizar los moldes de aluminio de usar y tirar que se vende por muy poco precio.

(*) La receta original lleva pasta brisa, la he sustituido por pasta filo lo que hace la tarta super ligera. 


jueves, 16 de marzo de 2017

BROWNIE (FALSO)




A la  Baronesa Frambuesa le sorprende la afición por lo falso. Según ella, ésta es costumbre extendida en este país,  más que en ningún otro, y no... tampoco hay que exagerar, no estamos solos en el universo de los must chinos. No hay rincón en el mundo, donde no te encuentres   "vutones, chaneles  guchis y dolches" en todas las esquinas; hacemos pódium (seguro), pero medalla de oro no somos...de momento. No comprende que satisfacción produce  llevar piezas falsas y aparentar lo que no existe si, además,  se lo toman en serio, le fascina.  No sé si es inocencia, sencillez , no conocer otra cosa que lo auténtico o elegancia;  bueno... tener   un armario del tamaño de la Capilla Sixtina, creo que también ayuda. Lo cierto es que ,  siempre tiene olfato para descubrir persona, animal o cosa  que no es lo que parece. 

Sin embargo,  el olfato hoy le ha fallado con este falso brownie. Mucho más ligero que un brownie de verdad, sin harina, con mucho menos azúcar y más razonablemente calórico que un auténtico brownie, le ha encantado y no ha cuestionado ni el nombre, ni la marca, ni la calidad, vamos... como un "auténtico vuton chino de mentira". Siento que se me están achinando los ojos...




INGREDIENTES:
- para 12 unidades -

250 gr de chocolate (*)
50 gr. de mantequilla
6 huevos
60 gr. de azúcar (*)

ELABORACIÓN:

Fundimos el chocolate a baja temperatura en el microondas. Añadimos la mantequilla
Mientras el chocolate entibia, batimos las claras a punto de nieve, con una pizca de sal
Batimos las yemas con el azúcar hasta que tripliquen su volumen, y las añadimos al chocolate, mezclando rapidamente. Si no tenemos mucho tiempo, suprimimos este paso y lo añadimos directamente al chocolate
Añadimos las claras integrando bien, pero con suavidad para que no pierdan volumen
Dejamos reposar en el frigo media hora (si tenemos tiempo).
Untamos abundantemente con mantequilla los moldes y cocemos a 180 grados, aprox. 12 minutos. Dejamos reposar un par de minutos ,  desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.




(*) En esta receta cuanto mejor sea el chocolate , mejor será el resultado final, lógicamente el sabor del chocolate de calidad se aprecia mucho

(*) La cantidad de azúcar es muy personal; estos llevan 5 gr. por pieza, en mi casa eso es suficiente, pero seguro que para algunos se quedará muy corto. Sabe a chocolate pero no es en absoluto dulzón

Estos bizcochitos admiten las variaciones que se nos ocurran, Algunos llevan un caramelo machacado groseramente, lo que da un gusto especial. Otros llevan por encima Lacasitos, que no aportan absolutamente nada, pero a los niños les gusta. Nueces al más puro estilo brownie, pasas, frutos secos, frutas confitadas... todo cabe Podemos añadir un topping a nuestro gusto; yo he introducido una cereza cubierta de chocolate y lo he terminado con nata mezclada con cacao, azúcar y un estabilizante para nata, para evitar que se baje, De todas formas, nunca aguantará tanto como los clásicos toppings de queso o mantequilla, aunque eso sí, será más ligero

Este bizcocho es   ideal como base para tartas, Con la mitad de estas cantidades tendremos suficiente para realizar una base de tarta; también para   una cheesecake mezclada con este bizcocho. Nos aportara sabor, y base para la tarta sin añadir harina, lo que la hará más ligera